Windows 8, el inicioSi queremos empezar a notar cambios entre Windows 8 y su antecesor justo después de la instalación, la velocidad de arranque es uno de ellos, claro esto también dependiendo del hardware a utilizar, pero en el equipo de prueba: Core i5 a 2.5GHz, 4GB Ram y 500 GB en HDD el inicio se completó en menos de diez segundos, algo brutalmente diferente a lo que Windows 7 ofrecía aún después de una instalación desde cero.
Sin duda el inicio para llegar a una nueva pantalla de bloqueo si es rápido, pero aunque lleguemos a una velocidad descomunal esta pantalla me parece que es el primer obstáculo a superar. Si uno nunca ha trabajado con un dispositivo táctil es difícil entender tanto su función como su acción, y lo peor es que por ningún lado tenemos la opción para desactivarla.
Si no tenemos un pantalla táctil para subir la pantalla de desbloqueo sólo basta con pulsar alguna tecla o el click del mouse o trackpad y esta pantalla de desbloqueo que también nos muestra un pequeño centro de notificaciones (que hubieramos querido que fuera más útil) pasará a segundo plano para mostrar el inicio de nuestra cuenta.
Una de las novedades integradas en Windows 8 es la sincronización, la cual se basa en usar nuestra cuenta de Microsoft que anteriormente se conocía como Windows Live ID en todos los dispositivos en los que tengamos instalado el sistema operativo, para sincronizar nuestra información personal, contactos, y algunas aplicaciones para su posterior descarga.
Windows 8 y su interfaz, es el principal cambioUno de los cambios más importantes dentro de todo el sistema operativo es la inclusión de aquella interfaz en donde los rectángulos y cuadros con movimiento son los que nos dan la bienvenida después de iniciar sesión.
Los efectos de actualización de cada “tile” nos dan la sensación de estar ante un mural con ventanas, donde cada una tiene una vista previa de lo que está en su interior. Las que tiene una información más detallada y mejor constituida son las aplicaciones que viene por defecto con el sistema operativo, en este caso Mensajes, Fotos, Correo, Calendario,…, etc, y que en definitiva son las que aportan una mayor ventaja a esta característica, sea un mensaje, un correo, una fecha en el calendario o una mención en Twitter, en cada pequeña “tile” se muestra esa notificación hasta que nosotros decidamos abrir la aplicación y entonces está se eliminará.
Fuente:
http://www.genbeta.com/a-fondo/windows-8-analisisSinceramente, me parece una mierda comparado con Windows 7, quita funciones más cómodas y supuestamente añade otras "mejores".
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