Prepárate Morgana. Prepárate, porque hoy va a ser una noche divertida.
Uhhh, me encanta cuando dices esas cosas, Joker. ¡Que no se hable más, vamos allá! ¡Joker!
Nos encontrábamos en pleno Shibuya, prácticamente idéntico al lugar del que habíamos accedido, apenas percibíamos diferencias. El palacio de esta víctima parecía ser... su propio apartamento. Un monoambiente situado en el piso más alto.
Hmm, un edificio moderno, en pleno Shibuya... me pregunto qué tipo de palacio será, aunque su concepto me gusta. Muy moderno, con clase.
Ya sabes lo que dicen, nunca juzgues un libro por su portada. Entremos y veamos qué sorpresas nos depara el interior.
Una vez dentro nos encontramos con que el palacio... vimos como todo seguía siendo exactamente igual a la realidad. Apenas notábamos cambios, nada de realidades distorsionadas, elementos oníricos... nada que nos pareciese extraño o ilógico. Era una planta baja completamente normal, aunque considerablemente amplia. Había varios sofás con varias mesillas, muchas plantas, una fuente en el centro y un ascensor al fondo. Había varias personas alrededor de los sofás, los cuales nos miraron y siguieron con sus conversaciones sin prestarnos demasiada atención.
Está todo demasiado normal... espero no encontrarnos un lugar como el último palacio que vimos.
Nah, no veo este lugar tan sádico. Al menos aquí no hay nada que nos tiente, así que encontraremos la seguridad más reforzada en las plantas superiores y ya.
... Espero que tengas razón, Joker.
Subimos al ascensor, y vimos que tenía insertada una llave en la parte inferior de los botones de los pisos. Intentamos ir directamente a la última planta, pero el ascensor tenía un mecanismo especial: necesitábamos una llave por cada varios pisos para abrir las siguientes zonas. Comprendido esto, nos adentramos en el piso superior de la primera zona.
No notábamos demasiada amenaza. Entre los pasillos para abrir los apartamentos había amplios espacios con una decoración muy similar a la de la planta baja: sofás y mesillas para la comodidad de los inquilinos. Aunque hubo una cosa que sí nos llamó la atención... y es que la gente que veíamos empezaba a mirarnos, poniendo la mirada fija en nosotros. No nos quitaban ojo de encima hasta que salíamos fuera de su campo visual. Ignoramos esa sensación de mal rollo y seguimos hacia adelante para encontrar, al final del pasillo, una llave con el mismo diseño que la que vimos en el ascensor. La cogimos sin pensárnoslo dos veces, y de pronto...¡¡Mrrrrraaaaaawwww!!
Todas las personas de la sala empezaron a abalanzarse sobre nosotros. Inversionistas, asistentes, representantes, mánagers... empezaron a cerrar nuestro paso. Lo peor de todo es que estaban completamente en silencio, lo único que podíamos escuchar eran sus pasos moviéndose al unísono. Una sensación de miedo nos recorrió toda la espalda y salimos corriendo lo más rápido que pudimos, buscando el ascensor para meternos allí lo antes posible.-
En la siguiente zona tuvimos que sufrir por un calvario similar, solo que con el añadido de tener que esquivar guardias de seguridad armados. Pero sin duda... el penúltimo fue el que consideramos el peor de todos. Tuvimos que aguantar gritos, muchísimos gritos. Gritos increíblemente agudos de fanáticas enloquecidas, como si acabasen de ver a su ídolo posarse ante sus pies.¡Ugh...! ¡Por dios, ya! ¡¡Tranquilas, ya, dejad de gritar!!
El volumen de los chillidos era tal que ni siquiera podía escuchar mi propia voz gritando. Encontramos la llave tras un póster firmado y fuimos lo más rápido que pudimos al ascensor.
-
La última prueba... eran láseres. No tenía pinta de que fuesen los típicos láseres de un concierto, no, porque cogimos una planta de la zona de descanso y al pasar por uno de ellos la planta quedó partida en dos. Hicimos lo que humanamente pudimos para atravesarlos sin ni siquiera rozarlos, ya que un mínimo contacto sería fatal.
Tras mucho esfuerzo... llegamos por fin a la puerta del dueño del palacio, la cual tenía un cartel en el que se veía claramente el número 131 con la letra M. La puerta estaba abierta. En su interior se encontraba el dueño del palacio, admirando un pedestal con un disco dentro. En el pedestal se podía leer la inscripción: M___ T__ W___ R___.
Heh. Vaya, vaya, mirad a quién tenemos aquí. Al ladronzuelo y al minino. ¿Qué, tan irresistible os parezco que habéis venido a robar mi corazón? Aw, me halagáis. Pero no será tan fácil, queridos.
¿Veis ése pedestal? Sólo podréis abrirlo con la contraseña correcta. Y sólo yo conozco esa contraseña. ¿Cómo lo vais a hacer? ¿Cómo vais a robarme el corazón? Nyeheheheh.
Ahora, cantad para mí. Demostradme que valéis la pena.
La batalla que nos brindó Elías Ceballos fue digna del mejor de los espectáculos. Utilizaba su propia voz y su guitarra para atacarnos, con las ondas sonoras era capaz de infligirnos suficiente daño como para dejarnos aturdidos. Sin embargo, no podíamos quedarnos parados.
*Slash*
*Slash*
*BANG*
Con un tiro certero conseguí romperle la guitarra y dejarle sin arma. Aprovechando su confusión, me moví rápidamente para poner mi daga sobre su garganta. Fue en ese momento cuando Elías empezó a suplicar clemencia, que le podía herir en cualquier parte del cuerpo salvo en la garganta... porque de ello dependía su futuro. No aflojé el pulso.
¡¡Aaagh!! ¡¡Está bien, te diré cual es la contraseña!! ¡Pero por favor, deja mi garganta, no podría vivir sin mi voz!
... *sigh* ...
Reconozco mi derrota. Has hecho que me dé cuenta de lo vulnerable que soy... cualquiera podría lanzarse a por mí y dejarme sin mi más agraciado don... no podría vivir sin mi voz. No podría permitirme vivir una vida sin poder cantar.
... Make The Wyrm Real. Esa es la contraseña. Adelante, Joker. Toma mi corazón si tanto lo deseas.
Así me gusta, que seáis obedientes.
Elías Ceballos, tu corazón es mío.
Ahá... ya entiendo por qué decías que esta noche iba a ser especial, claro. ¡Vamos Joker! ¡¡No perdamos el ritmo ahora!!
¡Y que lo digas, Morgana, y que lo digas! ¡¡Vamos, ni se te ocurra quedarte atrás!!
Accedimos al palacio sin más demora. Su aspecto no nos decía mucho... sólo veíamos un instituto aparentemente normal. Al entrar tampoco parecía que nos fuese a saltar nada ni nadie encima. Pero nos dimos cuenta de algo.Hey, ¿qué es... esto?
Hmm... ¿acaso podría ser lo que llevaba aquel chico a todas partes...?
Fue en ese momento cuando empezamos a escuchar un montón de gritos y un montón de pasos.
¡IDIOTA, IDIOTA, IDIOTA!
¿Cuántas veces tengo que repetírtelo? ¡Este pudding era mío!
Te mataré.
¿¡Q-qué!? Pero yo no he...
¡CÁLLATE, CÁLLATE, CÁLLATE!
Huimos de allí lo más rápido que pudimos, moviéndonos sin rumbo por el instituto mientras la horda de tsunderes nos seguían los talones. Tras un rato encontramos unas escaleras que subían hasta una gran puerta oscura... No las teníamos todas con nosotros, pero seguimos hacia adelante, de otra forma las tsunderes nos comerían vivos.Una vez dentro de la sala...
???: Parece ser que al fin me habéis encontrado. Que así sea, un cruel y doloroso final os aguarda.
Toda la sala empezó a temblar. Fue entonces cuando...
¡¡¡UOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!
GROAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARGHH
Apareció un enorme gorila dorado, destruyendo toda la sala. Luchamos como podimos por no ser aplastados por los escombros. Cuando por fin pareció que nos pusimos a salvo, miramos a la bestia... la cual embistió directamente contra nosotros.¡¡Mrrrawwww!! ¡¡Cuidado, aquí viene!!
Por nuestra vida, hicimos todo lo posible para esquivar todos sus ataques. Su brazo empezaba a romper las columnas de la sala, más escombros impedían movernos con total libertad. Haciendo gala de una extraordinaria agilidad, Morgana trepó por la espalda de la gorila, y con su tirachinas le propició un tiro certero en la nuca que la dejó noqueada. Fue el momento, aproveché para correr rápidamente por su espalda y con mi daga le puse fin a la batalla, haciéndole un tajo certero que no pudo evitar esquivar. Con esto...
la gorila se desplomó, y la victoria era nuestra.
En ese momento, la gorila parece regresar a su forma original.
Yo... lo siento muchísimo... no quería hacer nada de esto... yo realmente le q-qu...
...
Ah... ya lo comprendo. Tranquila, seguro que Simón acabará comprendiéndolo. Pero deberías ser un poco más honesta con tus sentimientos para que el pobre chico no vuelva a acabar así.
...
Tomad, con esta llave seréis capaces de salir de aquí y remediar toda esta situación.
Muchas gracias, guapa. De verdad, me alegra ver que al final has decidido colaborar.
¡Gek!
N-no es como si lo hiciese por vosotros ni nada por el estilo, tontos.
Utilizamos la llave que Chitoge nos dio para abrir el colgante que me apareció en el cuello. Fue entonces cuando por fin apareció el dueño de este curioso palacio.
¡... Tú...! Ya... ya veo. Joker, has... has sido tú, ¿no es así?
...
No... por supuesto que has sido tú. Tú has despejado la duda de mi corazón... ahora lo veo todo muchísimo más claro. La mujer a la que amo... sólo puede ser ella.
Bien hecho, tío. Por fin puedo dejar de pensar que Chitoge es mi mejor amiga. Toma mi corazón, te lo has ganado.
Un placer tomarlo,
Simón Ichijou. Tu corazón es mío.
Miau... Bien está lo que bien acaba. Gran trabajo, Joker. Ahora por fin podemos descansar...
¿Tan pronto te cansas? Me decepcionas, Morgana. Te imaginaba con más aguante.
¿¡M-mreow!? ¿Joker, vas a... ¡vas a...!?
¡La noche aun no ha terminado, Morgana! ¡¡Vamos, tenemos un último corazón que robar!!
Nos encontramos de pronto en la puerta de un opulento palacio, con una gran puerta y varios torreones con diferentes formas, cada una más colorida que la anterior. La apariencia imponía, pero a la vez nos invitaba a entrar... casi nos susurraba que accediéramos a su interior, y así lo hicimos.
Una vez dentro... nos dimos cuenta de por qué la apariencia exterior del castillo nos invitaba tanto a entrar. Imágenes de chicas con vestidos de sirvienta, de enfermera, de conejita... en general, las paredes del palacio estaban repletas de imágenes de chicas ligeritas de ropa y con poses extremadamente sugerentes. En el centro de la sala nos encontramos también varias barras... de las cuales me puedo hacer una idea de para qué servían al estar situadas sobre un escenario, y no creo que fuesen simplemente para sujetar el techo.
Oh... vaya, este palacio me trae recuerdos. ¿No te parece, Morgana? Recuerdos de cierto palacio basado en la autotortura...
Pero no parece que haya demasiada tortura por aquí... ¡miahahaha!~
De pronto, una risa inundó toda la sala. Una puerta gigantesca empezó a abrirse ante nosotros mostrando la sala principal del castillo, y en el centro de la misma vimos allí una figura que nos era familiar... sin duda nos resultaba familiar, era imposible no reconocerle.???: ¡¡Ya lo creo que no vais a encontrar ningún tipo de tortura por aquí!! Al fin y al cabo...
Este es MI palacio, y yo pongo las normas en él.
¡GYAHAHAHA!Tras él, una caja estaba situada en un pedestal. Se encontraba abierta... y dentro parecía haber unas bragas. Por algún motivo esas bragas nos resultaron familiares... pero el tesoro podía esperar.¡Ahí estás...! ¡Rance, Rance el Paladín! ¡Siempre he querido enfrentarme a ti, y ahora que tengo la oportunidad no pienso desperdiciarla! ¡Vamos, dame con todo lo que tengas!
¡Eso está hecho, Joker! ¡¡Vamos, de hombre a hombre!! ¡¡Luchemos con nuestros sables hasta que no nos queden fuerzas ni para respirar!!
Viéndome sacar la daga para luchar, Rance hizo un gesto de desprecio. Se giró, fue a una de las armaduras que decoraban los extremos de la sala, recogió el sable que empuñaba y me lo lanzó. A su vez, él desenvainaba su espada. Ambos alzamos nuestras hojas hacia el otro, y con un sonoro *cling* que se produjo al chocarlas, el combate empezó.
La fuerza y la velocidad del paladín era algo con lo que no podía rivalizar. Sus movimientos, sus ataques... eran imposibles de esquivar, y aunque estaba disfrutando cada momento de la batalla, no podía evitar sentirme derrotado ante tal potencia.¡No, Joker! ¡Deja que te cur-!
"No hace falta."
Era el momento... el momento de utilizar mi as en la manga.
La sensación de poder inundaba todo mi ser. Fluía por mis venas, recorría cada parte de mi cuerpo. Por fin... por fin lo había logrado. Había logrado despertar lo más profundo de mi ser. ¡Mi... mi Persona...!
Ravage him... ¡¡¡Arsène!!!
¿¡Qu-qué es eso!?
¡¡No... No me quedaré atrás, Joker!! ¡Who... whooooooooaaaaaaahhhhhh!
Con todas sus fuerzas Rance atacó a la bola de energía que Arsène creó. Tenía la fuerza suficiente para pararla y soportarla, ¡pero... la fuerza de Arsène era equivalente o incluso superior...! ¡Con un chasquido de dedos, añadí la última de mis fuerzas al poder de Arsène! ¡¡Rance... Rance el paladín había sido derrotado!!Heh... ese ha sido un gran combate, Joker. Por fin alguien ha conseguido vencerme... ansiaba que llegara este día. Adelante, no tengo más motivos para retenerte, has probado tu valía y sobre todo, tu hombría. Ha sido un verdadero honor luchar contra tan gran oponente.
El honor es mío, señor. Con gusto
te robaré el corazón, Rance el Paladín.
...............
...... Wow... Eso... eso ha sido impresionante. Tres... Tres robos en una sola noche. El poder que dices haber despertado parece... demasiado...
... Espero que no se te subiera a la cabeza, porque mira la situación en la que estás ahora mismo. Nada ni nadie es infalible en la vida... que te quede claro.
Volviste a utilizar la misma tarjeta SD, ¿no es así? La volviste a enviar en carta a LeBlanc, dirigida a
Elías Ceballos (MaestroCebolla),
Simón Ichijou (Shiron) y
Rance el Paladín (-Anthony-)...
Recibís un nuevo video. En este podéis ver dos relojes de péndulo colgados en una pared. Por algún motivo, el reloj izquierdo se mueve más rápido que el derecho.
No... ¡no debo dudar, no ahora!
¿¡Cual es el límite de tu poder!? ¿¡Hasta... hasta qué nivel eres capaz de cambiar los corazones de la gente...!?
Cuarto turno de día, damas y caballeros. Tenéis 48 horas para investigar la nueva pista y votar al que creáis que es el culpable que está robando vuestros corazones. Debido al retraso de este post, el cierre de la votación se retrasará a las
22:00 del 4 de enero (hora española). Hasta entonces...
