Argumento: En el mundo de Ivalice, dos grandes naciones están en guerra: Arcadia (al norte) y Rozaria (al sur). Dalmasca, reino situado en un enclave estratégico entre ambos reinos, cae presa de la guerra, y su rey resulta asesinado, recayendo la culpa sobre uno de sus caballeros: Basch. Tras la muerte del rey y de su prometido (el príncipe Rozariano) en la guerra, la princesa Ashe de Dalmasca desaparece tras lo que parece ser su suicidio, y Dalmasca cae presa del imperio.
Sin embargo, la princesa ha estado organizando una resistencia anti-imperial clandestina, y se preparan para liberar la ciudad. Acabarás viajando entonces por Ivalice, descubriendo la grandeza de su historia. El argumento gira en torno al legado del Rey Raithwall, agraciado de los dioses, quienes le entregaron las piedras de magicita, sustancia increíblemente poderosa y destructiva a su vez. Lo que en su día fue un reino unido, acabó sucumbiendo al paso del tiempo y dividiéndose en las naciones que hoy se conocen. La historia va revelando poco a poco la verdadera naturaleza de la magicita, y su papel en el mundo mientras que el grupo protagonista lucha por la derrota del imperio de Arcadia.
Es un FF distinto. Tiene una carga política intensa (con traiciones, planes mastermindeados y más spoilers), pero también tiene un toque místico y teológico que se va haciendo patente a partir de la mitad del juego. Me encanta la forma en la que el argumento se desarrolla, aunque de los 6 protagonistas, 3 sobran por no tener absolutamente nada que ver con el eje principal de la historia. Sin embargo, y aunque tenga una legión de haters, creo que merece muchísimo la pena, como FF, y como J-RPG.
El sistema de batallas deja de ser por turnos estáticos. Tienes una barra de carga, pero puedes moverte libremente por el mapa mientras luchas.Aparte, no existen las batallas aleatorias, pues tú mismo ves a los enemigos moviéndose por el mapa y puedes elegir si enfrentarlos o eludirlos. La meteorología tiene cambios, por lo que puedes encontrarte tormentas, días de sol, tormentas de arena, ventiscas y más. Además, los mapas están hechos con un preciosismo y detalle único, y luce genial aún siendo un juego de PS2.
Tiene un sistema de misiones secundarias que consiste en acabar con X monstruos únicos (llamados Escorias), que varían en poder, tamaño y forma de encontrarlos a través de los distintos mapas).
El juego te permite mejorar (aparte de por la subida de estadísticas con cada nivel) con el Tablero de licencias. Similar al sistema de esferas de FF X, con cada combate ganarás puntos que puedes invertir en un cuadro de licencia, y esto hará que las licencias adyacentes se activen para poder conseguirlas. El efecto de cada cuadro va desde darte una habilidad, a permitirte el uso de cada magia o invocación, armas, armaduras y sublimaciones.
Las sublimaciones son los limits de los anteriores FF. Son ataques especiales muy poderosos, que puedes encadenar si pulsas el botón adecuado para que otro personaje realice su sublimación tras la tuya. Si consigues un combo largo, puedes hacer cantidades de daño increíbles.
El juego original es de PS2. Creo haber leído hace poco que iban a hacerle un port HD, pero bueh, a saber si son habladurías o no.