Capítulo 3:El Reino.
Esa corazonada de fuerzas me fue de perlas,pero no lo suficiente,tenía que comer algo,pero los juegos de Zelda no expresan el hambre del personaje.Me quedé pensando mientras pasaba hambre,hasta que me sonaron las tripas.No lo dudé ni un instante,debía salir para cenar.
Al entrar en el agujero entré,como debería ser,en mi casa.Justo al momento de quitarme el traje y guardar la espada dijo mi madre:
-¡A cenar!
Fui rápido y veloz en el camino de mi habitación al salón,pero me agotó esa carrera por falta de alimento.Gracias a Dios que estaba en el salón y cenar al instante porque sino habría caído del cansancio.Ataqué la comida de forma feroz,tanto que mi madre me dijo:
-Tranquilo,no se va a escapar la comida del plato.-dijo sorprendida y con ojos como platos.
-Ya,pero es que tenía hambre. -le dije.
En ese tiempo de hambre y ataque de comida me entró demasiado sueño,tanto que me pareció extraño.Al acostarme me fijé en que el agujero estaba abierto,¡podrían atacarme los monstruos!Raudo y veloz acudía a cerrarlo,aunque no sabía nada de su cerramiento.Dispuse a pensar en Zelda y misteriosamente me respondió ella:
-Sí,¿que quieres?Ya veo que has cruzado el agujero,y el juicio también... -dijo con voz afirmativa.
-El juicio era tener el corazón preparado con el traje,bastante curioso.Pero,un momento,¿cómo es que me has respondido si no sé telepatía? -dije bastante alertado.
-Mira,cuando alguien cruza el juicio de la leyenda es capaz de comunicarse telepáticamente con quien sea. -me contestó.
-Bueno,pues adiós. -le dije.
Pero algo no me cuadraba,¿por qué puedo hablar telepáticamente si Link no puede?Tal vez era que ese agujero no lo tuvieron ellos,pero eso no importa.Al pensar en el agujero cerrado,porque probé si funcionaba,se cerró.Me resultó mejor hablar con Zelda que cerrar el agujero.
Al cerralo quedé totalmente rendido,me desplomé en mi cama y me quedé frito.Mi sueño fue el de Hyrule,tan verde y cuidado como el que vi,pero sin mí,es decir,no estaba yo,mi sueño era como una grabación de película con habían gente de toda clase.
A la mañana siguiente desperté en mi cama como mareado,cansado y con más sueño del que tenía anoche.Me dió la curiosidad de mirarme el envés de la mano y ví la Trifuerza,pero con todo los triángulos brillando.¿Es que yo no era como Link,era como el de Skyward Sword?Me fijé en que me iba recordando más y más a Link,pero con poderes distintos.No se ve un Link castaño todos los días,y menos que se llame Ismae en vez de Link.Era gracioso,pero pensé en sacarme fotos con el traje y la espada.Fue muy chulo,pero parecía un guerrero en la foto,demasiado pequeño de edad para serlo.Bueno,el de Ocarina of Time también lo parecía hasta el momento de la Espada Maestra.Al pensar en ella pensé en Fi,¿cómo sería en ese Hyrule?Todas esas preguntas preguntas las haría más tarde,pero la de si yo tendría la Espada Maestra siempre la pensaba.¿Yo con Fi en la espalda y la Espada Maestra?Ja,no me lo creía.
Después de ese tiempo de pensamiento otra vez me derrumbó el sueño,hasta que vi algo horroroso al ducharme en mi pecho,¡un círculo oscuro!Intenté contactar con Zelda mientras me duchaba para ayudarme en mi horroroso problema y respondió:
-Bueno,¿en qué te ayudo ahora? -dijo alegremente.
-Mira,ayer entré en Hyrule y al salir estuve cansado y con sueño,¿qué me pasa?Y rápido,que me estoy duchando. -contesté sospechando de su alegría.
-Mmmm...¿viste un monstruo raro y le hicistes algo?
-Sí,y le clavé la espada en el corazón.
-¡No!¡Esos monstruos son infecciosos,te debilitan al rozarte,y pueden causar la muerte! -dijo chillando.
-¡Mierda!Pues,¡¿qué debo hacer?! -dije tan asutado que se me resbaló el bote de champú del susto al plato de ducha.
-Calma,calma.Primero quédate relajado,piensa en el agujero y quédate delante de él pensado en la curación del alma.Funcionará,y hay más remedios,pero sólo conozco ese,lo siente. -dijo calmada.
-Vale,lo intentaré.
Corté la conversación de golpe y activé el agujero en la ducha.Mirando el bote de champú del plato de ducha que se cayó antes me fijé que se iba al agujero,porque lo coloqué cerca el agujero del bote caído,¡se entró en Hyrule!Sólo había una solución,¡meterse!Pero estaba desnudo,¡qué vergüenza!Afrontando que no podía irme de la ducha sin enjabonarme el pelo decidí entrar un momentín desnudo en Hyrule,¡Dios,qué vergüenza!Menos mal que no había nadie,porque sino...pero pasé vegüenza aunque no había nadie porque un héroe visto desnudo no sería un buen ejemplo.Al tomar el champú y cerrar el agujero me duché.
Totalmente aseado me dispuse a vestirme y curarme con el agujero,en el que me costó mucho,ya que era muy lenta.A lo mejor los otros remidios que Zelda decía no saber eran rápidos.Bueno,al terminar después de una hora el círculo del pecho desapareció,permitiendo que el cansancio se fuera.
Fresco como una lechuga me dirijí a desayunar,y acto seguido ir a Hyrule.Me vestí con el traje de Link,pero había un problema,¿para qué me vestiría tanto al terminar de ducharme si tenía que ir a Hyrule con mi traje?La próxima vez lo planifico mejor.
Al estar con todo mi equipo me embarqué de nuevo en Hyrule,sin nadie que me impidiera avanzar por ella,aunque me resultó extraño.Decidí ir a un catillo que había a lo lejos,¿sería el Castillo de Hyrule?Sin dudarlo me dirijí hacia allí.
Al estar en la entrada aparecieron guardias que cruzaron sus lanzas en el camino de entrada,impidiendo así el camino.
-¡Identificación! -dijeron al unísono.
-Qué identificación ni qué ocho cuartos... -murmuré por lo bajini.- Vengo de lejos,¿qué debo hacer para entrar?
-Debe dar una identificación de pase hacia este reino. -dijo con voz grave.
-Ah...bueno,pues,disculpen las molestias. -dije tristemente.
Vi que por un lado del reino había un río que finalizaba en el interior del reino,¿podría entrar por ahí?Lo intenté,pero fijándome a la vez si los guardias me pillaran.Entré con éxito,y me dirijí al interior del reino,y vi un cartel cuyo nombre inscrito en él era R.H.: Plaza.Supuse que R.H. sería Reino de Hyrule,dado que había en el puente de entrada un gran cartel con esas letras.
Dejando aparte las siglas,vi una inmensidad sin fin de comercios,tiendas de medicinas...Bueno,como la de Twilight Princess pero más grande.Me dispuse a cotillear todo,y me fijé en la gente,que era como yo,pero con orejas puntiagudas,como debía ser.No tenía dinero de Hyrule,es decir,rupias,con lo cuál los euros no servirían de mucho.Me fui a la parte del castillo,pero ahí ya no había manera de entrar,había guardias por todas partes,y bastante duros por la apariencia.
-Disculpe,¿puedo pasar? -dije con voz melancólica.
-¿Viene a orar? -dijo el hombre rápidamente.
-Sí... -dije callado.
-Muy bien,ya no se ve chicos como tú por aquí y menos para orar. -respondió con un cambio brusco de tono de voz. - Bueno,pues pasa.
Pasé,y ví un largo pasillo,pero de pronto alcancé con la vista una habitación con una mujer dentro,¿quién sería?
Continuará...