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http://www.pokexperto.net/foros/index.php?topic=65559.msg2629621.msg#2629621Prólogo
Otra vez estaba delante de la Profesora Encina, en medio de la nada...
-¡Te doy la bienvenida al mundo de los Pokémon -dijo, sonriente-!
-¿Esto qué es, un deja vu de esos -le pregunté, consciente de que hace 2 años había vivido algo muy similar-?
-No, unas secuelas -me contestó.
-Pero si la primera parte de este fic se quedó sin terminar...
-Mira, a mí tampoco me hace gracia tener que repetir esta parte, así que deja de buscarle la lógica y vamos al grano que tengo muchas cosas que hacer hoy.
-Vale, pero ¿podemos saltarnos las preguntas? Lo digo porque ni siquiera te has molestado en buscar un nuevo prota para esto y ya las respondí hace 2 años...
Ahí se produjo un silencio incómodo que duró varios largos minutos, hasta que al fin se dignó en contestar:
-Está bien, pero que no se enteren los de arriba, que no veas la que me puede caer si no pregunto eso...
"¿Pero qué c******? Ni que fuera esto una mafia.", pensé para mis adentros.
-Eso sí -prosiguió-, me tienes que decir cómo se llama tu nuevo rival.
-¿Significa eso que ya puedo llamarle putas para ir a la casa de ídem?
-No. Su casa no tiene cartel y encima esta generación censura palabras.
-Mierda... Pues ponle el nombre que te dé la gana.
-Ok, pues Matís.
-Ehm... ¿Por qué eso?
-Porque es lo primero que sale al escribir.
-Oh...
-Bueno, ¡prepárate para entrar (otra vez) en el mundo de los Pokémon!
Capítulo 1: Otro comienzo más
Un nuevo día empezaba en la región de Teselia, donde una nueva promesa procedente de Ciudad Engobe *ejem* digoooo, el mismo de la primera parte pero reciclado y sin Pokémon, estaba a punto de empezar su propia aventura.
-Joder, que esto es en primera persona.
Cierto, no me acordaba. Mi madre se detuvo delante de mi casa sin motivo aparente para mirar a la nada, cuando su Videomisor empezó a sonar.
-¿Sí -contestó-? ¿Que le vas a dar a mi hijo una Pokédex? Eso es maravilloso. ¿Y cuándo vendrás? Ah, que ya has mandado a alguien. Nunca cambiarás, en fin...
Tras colgar, entró en casa y se dispuso a llamarme.
-¡Adrizard! ¡Ven aquí!
-Mamá, no hay necesidad de gritar -dije-, para una casa de entre todas las poblaciones iniciales que tiene un solo piso...
-Ah, sí, bueno. ¿Conoces a la Profesora Encina?
-¿Te has leído el prólogo?
-En fin, es una amiga mía de cuando era joven. Ahora llega la parte crucial: ¿quieres tener tu propio Pokémon?
-Después de que todos los que conseguí en la primera parte desaparecieran misteriosamente, comprenderás que sí...
-¡Bien! Ya hemos dado el primer paso. ¿Sabes lo que es una Pokédex?
-Sí, aunque sea para evitarme tochos innecesarios.
-¿Y quieres tener una?
-Joder que sí, la función de habitats de estas ediciones es demasiado buena.
-Perfecto, ya hemos dado el segundo paso. La Profesora ha mandado aquí a una joven para que te dé tu primer Pokémon y tu Pokédex. Se llama Bel, la reconocerás por su gorro verde. Es la primera vez que viene aquí, así que puede que se haya perdido, deberías ir a buscarla. ¿Sabes usar el Videomisor?
-Sí.
-Es tan sencillo como...
-¿Qué te he dicho de los tochos innecesarios -contesté rápidamente antes de irme-?
A la salida de casa, me encontré a un chico con el pelo de punta azul, que vestía una chaqueta roja, con una niña pequeña. Claramente eran Matís y su hermana. Ambos se acercaron a mí, y Matís se dispuso a hablar.
-Ya me he enterado de la noticia, así que te van a dar a tu primer Pokémon.
*Cuidado con este, que pone la oreja y cotillea a más no poder...*, pensé.
-Pues sí, al parecer una tal Bel con gorro verde me lo dará, la estoy buscando -le contesté.
-Adrizard -me dijo su hermana-, si consigues un Pokémon, trátalo bien.
El silencio se apoderó del momento, hasta que Matís se atrevió a contestar.
-Bien dicho. Oye, vete a casa, yo voy a ayudar a Adrizard a encontrar a esa tal Bel, ¿vale?
-Vale -contestó antes de entrar en casa.
Así comenzamos a buscar a Bel. Era obvio que no iba a estar en ninguna casa ajena (aunque con la lógica Pokémon nunca se sabe), así que nos saltamos esa parte. Matís me dijo que ya había estado en el Centro Pokémon y no estaba ahí, y con el gimnasio-escuela cerrado y ni rastro de ella en las calles, solo quedaba buscar en el mirador antes de salir a la Ruta 19.
-¡El mirador -dijo Matís-! Seguro que está ahí.
*Este se ha estudiado toda la trama de este fic*, pensé.
En lo más alto, vimos que alguien estaba viendo las vistas de la Ruta 19. Era Bel.
Continuará...