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Literatura y Fan Fiction / Re:[Relato] Dirección de la venganza (La historia oscura de Nosepass)
« en: 15 de Septiembre de 2011, 06:14:50 am »Aviso: Este fic lleva partes en las que se habla de sangre y muerte, así que si no te gustan esos fics ya puedes salir cagando leches (?)Muy bueno.
Tampoco esperéis un Best Seller, tan solo me apetecía escribir unabonitahistoria de Nosepass y Probopass
Por último, si el tema no lo veis adecuado dadle al candadito. Yo pregunté si podía meter este fic aquí en el OOT, la culpa es de ellos (?)Dirección de la venganza
Actualmente hay confirmadas más de 600 especies Pokémon. Cientas de estas viven en el profundo mar de nuestro mundo. Otras necesitan vivir surcando los celestes cielos de la región. Y no se nos puede olvidar aquellos que van de un lado a otro nada más desplazándose por el buen suelo firme. Todas estas especies tienen en común su convivencia en armonía con los humanos, pero... ¿siempre fue así?
Antiguamente en el Monte Corona, una gran tribu de antepasados que habitaban dentro de dicho terreno hacían una actividad imperdonable. Cada cierto tiempo, atrapaban un Nosepass, que luego sumergían en agua mientras que un grupo se ocupaba de quebrarlo hasta que el pobre Pokémon acababa destrozado en cientos de pedazos. El sacrificio se tomaba como un favor al Dios Pokémon, dado que Nosepass se le denominaba un engendro que tenía que ser erradicado.
En ese entonces, Nosepass era un Pokémon despierto. Conservaba unos grandes ojos redondos de iris azul dentro de aquellos huecos negros, y una gran nariz triangular asomaba con un color azul más claro que el del resto del cuerpo. La manada de Nosepass no carecía de inteligencia; sabían perfectamente que aquellos humanos querían acabar con ellos de una manera cruel e injusta, pero no decidieron atacar hasta que la manada disminuyó terriblemente llegando a ser de tan solo cuatro miembros de la raza.
La tribu capturó al quinto de los Nosepass supervivientes con cuerdas formadas por lianas y redes que en cada extremo sostenían roca de aquellos Nosepass maltratados hasta la muerte. El sacrificio fue fijado para el atardecer, que fue celebrado con éxito.
El cuarteto de Nosepass completó su plan para entonces. Ansiaban venganza. Esperaron el día de la caza de Nosepass. Todos los cazadores partieron en búsqueda de aquellos narigudos Pokémon que no tomaban como amenaza. Necios ellos dejaron el pueblo sin protección alguna. Era la hora de atacar. Ya con la estrategia preparada, los cuatro Nosepass lanzaron rayos y destellos a la población, dejando a un gran número ciegos y a otros calcinados. Esa venganza no les llenó por completo, y decidieron sacrificarlos de una manera similar a la que usaban ellos. Afilaron sus brazos y empezaron a desmembrar a aquellos ciudadanos que quedaron ciegos. Gritaban de dolor y terror, necesitaban que aquellos gritos se oyesen por la cueva para que aquellos cazadores que partieron los salvasen, pero estaban demasiado lejos para que los ecos se escuchasen.
Uno de los Nosepass, tras acabar la macabra faena, agarró tanto los cuerpos ensangrentados como los carbonizados y se los empezó a guardar "dentro de él", haciéndolos entrar por su triangular orificio nasal, mientras su nariz se teñía del color rojo de la sangre. Eran demasiados cadáveres los que quiso ingerir, y empezó a resquebrajarse. Sus amigos Nosepass buscaron rocas y minerales para "curar" esas heridas. Los cadáveres desmembrados de aquella gente empezaron a asomar por la parte superior de aquel Nosepass junto el cerebro del mismo, mientras que los cadáveres carbonizados se engancharon en el orificio nasal, imposibilitando la entrada de más cuerpos. Sus ojos empezaron a expulsar la nociva sangre de los habitantes que rompieron parte de la rocosa piel azul que tenía contacto con la nariz y sus pies se rompieron por el insoportable peso que contenía en su interior.
Los cazadores, neciamente alegres por creer que la odiada especie nariguda ya estaba extinta empezaron a volver al pueblo de la tribu. Cuando vieron la macabra escena y aquel endemoniado Nosepass de nariz roja, soltaron las armas y salieron corriendo al interior de la cueva queriendo huir. Los tres Nosepass salieron tras ellos. El mutado, dado que sus piernas las acababa de perder, usó su fuerza magnética para moverse gracias al magnetismo de la tierra. Llegó a ser más rápido que los Nosepass corrientes, por lo que por impulsos magnéticos los agarró y se los trajo a él. Los asustados cazadores, viendo que aquel Nosepass les adelantaba, empezaron a girar en distintas direcciones. El sanguinario Pokémon lanzó a base de ondas magnéticas a sus amigos narigudos alcanzando a algunos cazadores. Los golpes de aquellos movimientos rompieron huesos y dañaron órganos, produciendo la muerte a estos. Por desgracia para esos Nosepass normales, el mutado compañero los lanzaba con tanta fuerza que cada vez que su ataque fallaba los quebraba y rompía. Ya solo quedaba un humano. Aquel último cazador, temiendo por su vida, corrió hacia el endemoniado Nosepass y se agarró a aquel sombrero de cadáveres, el cual en la cima abultaba el cerebro del Pokémon. Cuando uno de los Nosepass destrozados se acercaba rápidamente hacia aquel cazador, agarró el cerebro y lo llevó delante suya. La nariz del Nosepass "arma" impactó contra el cazador, este se partió en dos, y con él el cerebro del monstruoso Nosepass, que perdiendo el control lanzó los Nosepass a las paredes de la cueva, haciendo que esta se viniese abajo.
Tanto la tribu como los Nosepass desaparecieron de la zona hasta que, miles de años después, la civilización mundial empezó a tener contacto entre los distintos puntos del mundo y traspasaban fronteras regionales. Entrenadores de Hoenn que conservaban Nosepass capturados en la Cueva Granito viajaron a Sinnoh como otros muchos, pero para sorpresa de ellos sus Nosepass evolucionaban "sin ninguna razón" en aquella montaña a un Nosepass mayor de rojiza nariz, poblado bigote y cabeza roja, con 3 extremidades muy parecida a aquellos Nosepass de la antiguedad. Mas tarde con el tiempo, los Nosepass evolucionados, ya entonces llamados Probopass, empezaron a criar Nosepass de nariz roja, como sus padres, y volvieron a poblar el Monte Corona que tanto tiempo pasó sin ellos.Spoiler: Imagen gore del fic mostrar[/spoiler]
PROBOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO